El ejercicio fiscal 2020 se presenta como un período difícil para la recaudación de impuestos, a causa de la desaceleración de la economía y la caída de más de 5,000 millones de lempiras que refleja el pago de tributos en 2019.

De acuerdo con el plan de ingresos que ha sido determinado por el Poder Legislativo, la meta de los ingresos tributarios es de 110,000 millones de lempiras.

El mayor aporte provendrá el Impuesto sobre la Producción, el Consumo y Ventas, estimado en 48,300 millones de lempiras. Dentro de esta obligación fiscal, se destaca la carga sobre las cervezas, el aguardiente, el licor, bebidas gaseosas y cigarrillos que dejarán al fisco más de 3,000 millones de lempiras.

La aplicación del impuesto del 15 por ciento tendrá un rendimiento de 42,000 millones de lempiras y el tributo del 18 por ciento representará un ingreso de 2,100 millones.

Por el lado del Impuesto sobre la Renta, la captación durante 2020 llegará a 37,000 millones de lempiras. De esta suma, mil millones serán aportados por personas naturales y 6,900 millones por las jurídicas.

Los pagos a cuenta tendrán una participación de 11,700 millones de lempiras y la retención en la fuente será de alrededor de 5,500 millones de lempiras.

Los pagos a cuenta de aportación solidaria sumarán 1,700 millones de lempiras durante el período fiscal 2020, según lo detallado en el Presupuesto de la República.

Los impuestos sobre la Renta y sobre Ventas, constituyen casi el 80 por ciento de los ingresos tributarios proyectados para el año entrante, los cuales están calculados en 110,000 millones de lempiras.

Se espera que el Impuesto sobre Servicios y Actividades Especificas aporte a las finanzas públicas 18,600 millones de lempiras y el que es cargado a las importaciones dejará 4,700 millones.

Por concepto de Impuesto sobre la Propiedad, el Estado percibirá más de 800 millones de lempiras y el tributo a los Beneficios Eventuales y Juegos de Azar derramará una cantidad de 20 millones.