Alessandro Alleruzzo, miembro de la Cosa Nostra, la mafia siciliana, e hijo de uno de los jefes de los clanes locales, fue detenido por el homicidio de su hermana Nunzia en 1995 porque tenía relaciones extraconyugales y había abandonado al esposo.

En una nota de los Carabineros de Catania se explica que el delincuente asesinó a la joven con dos tiros en la cabeza, como se comprobó tras encontrar su cadáver enterrado en un campo tres años después, para "lavar su honor" debido a los supuestos romances que tenía con otros hombres "incluidos criminales considerados enemigos de la familia".

Alleruzzo, de 47 años, es hijo del difunto jefe del clan, quien en los años 1970 y 1980 dirigió el grupo de Cosa Nostra de la localidad de Paternó, protagonista de una sangrienta guerra mafiosa contra los miembros del clan Santapaola de Palermo. En los años 1990, tras ser arrestado y después de que matasen a su esposa y su otro hijo, decidió colaborar con la justicia.

Fue él quien desde la cárcel ordenó que se indicase dónde estaba el cuerpo de su hija para poder enterrarla.

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Solo recientemente a raíz de las declaraciones de tres colaboradores de la justicia (Francesco Bonomo, Antonino Calió y Orazio Farina) se pudo reconstruir que Nunzia fue asesinada por su propio hermano.

Bonomo informó haber sabido por Giovanni Messsina y Calió que el homicidio había sido cometido por Alessandro, redimiendo así el honor de la familia, violado por el hecho de que ella había tenido numerosas relaciones sentimentales con miembros del clan, abandonando el esposo.

El 30 de mayo de 1995, el hijo de 5 años de Nunzia Alleruzzo, dijo que vio a su madre salir de la casa con su tío Alessandro, pero no se habían obtenido más pruebas hasta las declaraciones de los exmafiosos colaboradores de la justicia.

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