No es por casualidad que los habitantes de las colonias Guillén y Nueva Santa Rosa atraviesen con un momento de desgracia y que los pobladores de zonas aledañas estén en condición de alto riesgo.
El 40 por ciento de los capitalinos (cuatro de cada diez personas) habitan franjas del territorio que son de mediana o alta peligrosidad por los deslizamientos. Los informes levantados por especialistas en contingencias, señalan que cerca de 800 repartos tienen algún nivel de amenazas.
Las evacuaciones de emergencia continúan en los sectores de la Guillén y la Nueva Santa Rosa. Hasta ayer habían sido movilizadas unas 70 familias y estaban pendientes de ser reubicados 50 grupos más.
El escenario es dramático. El viernes la zona número 2 de la colonia Guillén había desaparecido; las viviendas cedieron ante la inestabilidad del suelo.
El sitio fue declarado "de desastre" por una falla geológica que ha provocado el derrumbe de decenas de viviendas. La situación podría agravarse, porque Alerta Temprana ha advertido que hay pronósticos de lluvias con altos acumulados que facilitarán el deslizamiento de tierra.
En la atención de esta emergencia se ha cuestionado la falta de presencia del personal de Copeco, entidad ésta que tiene la responsabilidad elemental de asumir la gestión de contingencias. Las evacuaciones las han realizado efectivos de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional, en conjunto con elementos de la Alcaldía Municipal.
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Los habitantes de los asentamientos donde hay destrucción, se han quejado. Aseguran que únicamente han sido trasladado a los albergues; sin embargo, no les han provisto de lo necesario.
En algunos casos, se han visto obligados a financiar el servicio de transporte y la movilización de los pocos bienes que pueden rescatar. Otros vecinos, todavía se resisten a abandonar sus casas.
Una petición generalizada de los pobladores perjudicados está referida a que las autoridades ofrezcan una solución a su drama, ya que sus casas están dañadas o destruidas. "¿Dónde podemos ir?", se preguntan los compatriotas que están literalmente en la calle.
Autoridades de la Alcaldía del Distrito Central informaron que tienen habilitados seis centros de refugio para acoger a quienes han sido alcanzados por la desgracia.
Los Comités de Emergencia han sido activados para tomar y poner en ejecución las decisiones sobre los proyectos de reubicación de los habitantes y atender su solicitud de construcción de las viviendas en un sitio seguro.
El 40 por ciento de los capitalinos viven en zonas de moderado y alto riesgo, debido a que están atravesadas por fallas geológicas y, por tanto, proclives a derrumbes y deslizamientos. Es obligatorio que se retomen los temas de la mitigación de desastres y reordenamiento territorial.
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