El Tribunal Superior de Cuentas (TSC) presentó este miércoles un reporte del control concurrente y fiscalización en las compras de productos alimenticios y maquilación de bolsas solidarias, por parte de Banasupro, con relación a la emergencia sanitaria por covid-19.

“La acción que está realizando el Tribunal Superior de Cuentas en Banasupro no es una auditoría, sino un acompañamiento mediante control concurrente al proceso de maquilado de bolsas solidarias en el marco de la 'Operación Honduras Solidaria', no obstante, de encontrar hechos irregulares que den indicios a responsabilidades administrativas, civiles o penales se realizará una auditoria especial, con el fin de sancionar a los funcionarios”, detalla el informe.

https://twitter.com/TSCHonduras/status/1263164913876336641?s=20

En ese sentido, las autoridades detallaron, mediante un comunicado, que “como parte del Control Concurrente el equipo de auditores del TSC acompañó a la Unidad de Auditoría Interna de Banasupro en la verificación de una serie de actividades, entre ellas inspecciones de permanencia del personal contratado, la revisión de bolsas solidarias elaboradas con el fin de constatar el cumplimiento del menú establecido en cuanto a productos y cantidad y la verificación de la entrega de los productos por los proveedores”.

El informe del Tribunal Superior de Cuentas detalla además que mediante facturas se recibió de los proveedores productos valorado en 42 millones 187 mil 977 lempiras para la elaboración de sacos y bolsas.

De acuerdo con la información brindada, se entregó a las Fuerzas Armadas de Honduras, entre el 25 de marzo y el 5 de mayo, un total de 1 millón 142 mil 389 bolsas solidarias y 32 mil 805 sacos.

El TSC encontró la debilidad relacionada a que las órdenes de compra no son firmadas por los proveedores. Además, que no hay existencia de contratos firmados por el personal que integra la operación Honduras Solidaria, ya que no se disponía del presupuesto asignado.

La operación Honduras Solidaria consistente en la entrega de alimentos a 3.2 millones de hondureños, que se encuentran vulnerables en medio de la pandemia del coronavirus.