El padre de la niña de ocho años que murió por el ataque de un perro pitbull en Lepaera, Lempira, aseguró este jueves que mató al animal, pero este "revivió" porque estaba "endemoniado".
"Mi hija estaba tendida, yo enloquecí, yo maté al animal, pero quizás algún demonio se le había metido , porque cuando vino el Ministerio Público el animal volvió (revivió) nuevamente", relató Leopoldo Argueta, papá de la víctima del can, identificada como Alisson Nahomy Argueta, de 7 años
El lamentable hecho ocurrió el 8 de junio la casa donde la niña vivía con su padre en el barrio Las Delicias de ese ciudad occidental del país.
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Además, el hombre comentó que el canino era la mascota de la casa, el cual tiene 6 meses de edad, y que su hija lo "alimentaba y cuidaba".
"Ese perrito era la mascota de la casa, 6 meses, el diablo actuó, mi hija lo alimentaba y lo cuidaba, realmente no es de fiar con este tipo de animales", añadió.
Posteriormente recordó que a las 3:23 de la tarde del miércoles 8 de junio recibió una llamada de un tío de su hija, quien le avisó que su hija había sido atacada por el perro.
Fue así que hombre llegó a su vivienda y, según dijo, vio que "ella tenía enrollada la cadena del perro en su cuello y tenía rasguños en su cuerpo, le vi el cuello destrozado".
En otro hecho similar, el 8 de junio, un niño de 5 años de edad sufrió daños severos en su cara y cabeza tras ser atacado por un pitbull en la comunidad de Diamond Rock, en Santos Guardiola, Roatán, Islas de la Bahía.
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