Zepeda destacó en el programa La Tarde, de HRN y TSi, que la reducción de impuestos indirectos, como el Impuesto sobre Ventas, es un tema histórico que beneficia a quienes tienen menos recursos, ya que el impacto en su capacidad de compra es más significativo.
Y es que, según opinión de algunos economistas, la reducción del Impuesto sobre Ventas, que es de 15% desde el año 2014, durante el gobierno del expresidente Juan Orlando Hernández (2014-2022), "dejaría más dinero en el bolsillo de los hondureños".
Bajo este gravamen se recaudaron unos 10,400 millones de lempiras hasta el 2 de mayo de 2023, sumado a los 16,200 millones de lempiras en impuesto sobre la renta y 3,400 millones en otros impuestos.
En tal sentido, el economista critica la idea de que la aprobación de esta ley deba ser utilizada como moneda de cambio y cuestiona si las autoridades económicas han analizado adecuadamente el impacto que tendrá la aprobación del proyecto de Ley de Justicia Tributaria en la recaudación tributaria, especialmente en la eliminación o regulación de exoneraciones fiscales.
Este proyecto de ley, que aún está en su etapa de discusión en el CN, ha recibido críticas por diversos sectores porque aseguran que esta alejaría la inversión nacional y extranjera de Honduras.
Asimismo, hizo hincapié en la importancia de considerar el gasto público en esta discusión, argumentando que la reducción de ingresos del gobierno no debe conducir automáticamente a la búsqueda de deudas o a la eliminación de exoneraciones, sino que se debe analizar y reducir el gasto público de manera efectiva.
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Destacó, además, que la burocracia gubernamental es alta y que es necesario revisarla para hacer más eficiente el uso de los recursos.
El analista resaltó que la discusión debe ir más allá de la recaudación de ingresos y abordar también el gasto público.
Advirtió, en ese aspecto, sobre la necesidad de un enfoque integral que considere las consecuencias en términos de empleo y condiciones de vida de la población, especialmente en un momento en el que empresas podrían estar trasladándose a otros países debido a la carga fiscal.
Sobre el presupuesto del Estado
Zepeda mencionó también la importancia de evaluar el presupuesto General de Ingresos y Egresos del Estado y hacer un seguimiento riguroso para garantizar que los recursos se utilicen de manera efectiva y beneficien a la mayoría de la población.
Señaló también que la reducción del gasto público y un enfoque más estratégico en la asignación de recursos son esenciales para abordar los problemas económicos y sociales de Honduras de manera sostenible. El presupuesto de 2024 se presenta como una prueba clave para la Administración pública en este sentido.
El presupuesto de la República para 2023, aprobado en enero, fue de más de 392,000 millones de lempiras, mientras que el presupuesto para 2024, que será planteado en las próximas semanas, podría superar los 410,000 millones de lempiras.
(Artículo de Javier Álvarez con el apoyo de la Inteligencia Artificial).
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