Uno de los principales nudos que tiene el Presupuesto de la República es la presión ejercida por el gasto corriente y el endeudamiento.

Los versados en el tema concluyen que el otorgamiento de acuerdos a empleados públicos que estaban bajo la modalidad de contratos en la administración pasada provocó un incremento de no menos de 2,000 millones de lempiras en el plan de ingresos y gastos.

Está previsto que el pago de sueldos y salarios se llevará más de 80,000 millones de lempiras y que el pago de la deuda pública absorberá más de 52,800 millones, una de las obligaciones con mayor peso sobre las finanzas.

En estos dos rubros el país destina 55 de cada cien lempiras de ingresos tributarios del Gobierno Central, señalan los análisis de organismos de la sociedad civil.

De acuerdo con lo que han planteado los estudiosos, la reformulación del Presupuesto para el ejercicio 2022 debe estar cimentada -justamente- sobre la reducción del gasto y la disminución del endeudamiento.

La propuesta orientada a reestructurar el Presupuesto 2022 identifica que la educación, la salud y la equidad social, son las prioridades que deben ser retomadas.

Para este año fueron aprobados ingresos por 179,500 millones de lempiras para la Administración Central y una asignación de más de 128,700 millones de lempiras para la gestión descentralizada.

El Presupuesto que corresponde a este año incluye gastos por el orden de más de 308,000 millones de lempiras para toda la  Administración Pública.

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Las autoridades que tomaron la conducción del Estado de Honduras a finales de enero, denunciaron que el Presupuesto que fue discutido y aprobado por el Congreso Anterior "no es real", "es falso".

Así como está elaborado, se supone que el 80 por ciento del mismo sería financiado con recursos tributarios y el 20 por ciento con fuentes externas.

El Gabinete de Gobernabilidad tiene una asignación de ocho mil millones de lempiras; el renglón social aparece con una partida de 66,000 millones; y el económico, con una suma de 85,000 millones.

El Gabinete de Infraestructura, Servicios y Empresas Públicas opera con un presupuesto de 56,000 millones; Prevención, Seguridad y Defensa, tiene aprobado un monto que ronda los 20,000 millones de lempiras; los entes que no forman parte del Poder Ejecutivo, una asignación de casi 8,000 millones; y los organismos que dependen de la Secretaría de la Presidencia cuentan con un presupuesto de 984 millones.

Organismos de la sociedad civil que se ocupan de analizar el manejo de la hacienda hondureña cuestionan que el Presupuesto de 2022, incrementado en más de 20,000 millones de lempiras respecto al de 2021, no establece medidas de contención para administrar la crisis económica que abate a Honduras.

Tampoco genera condiciones para atraer inversión y crear el ambiente favorable al ordenamiento de las finanzas, el desarrollo de la economía y el mejoramiento de los niveles de vida de la población deprimida.

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