Un vendedor de quesadillas de 28 años de edad fue asesinado en la Gustavo A. Madero de la Ciudad de México, presuntamente por negarse a ser extorsionado.

El vendedor, identificado como Guillermo Trejo, acababa de cerrar su puesto de quesadillas en la colonia Panamericana. Luego subió a su auto, cerrando su jornada laboral.

Al llegar a su casa, ubicada en la calle Poniente 112, todavía en su auto color negro, dos sujetos en motocicleta aparecieron y le dispararon.

Guillermo, aún con vida, logró decirle a los policías que un hombre de negro efectúo disparos en su contra sin mediar palabra.

Sin esperar a los servicios médicos de emergencia, el hombre fue trasladado a un hospital donde murió.

En el automóvil iba una mujer (sin parentesco definido con del vendedor) y resultó ilesa físicamente, pero presentó una crisis nerviosa.

En el lugar, peritos encontraron al menos doce cartuchos percutidos de una arma calibre 9 milímetros. La Fiscalía mexicana realizó las investigaciones del caso y en su declaración indicaron que Guillermo se había negado a ser extorsionado.

Según comerciantes de la colonia donde estaba el negocio de quesadillas, les piden 750 pesos mexicanos semanales para poder vender en la calle, pero a Guillermo le habían pedido 30 mil pesos por toda la temporada navideña.

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