El padre del bebé de siete meses que falleció en una balacera en la colonia San Judas de La Ceiba, expresó que la misma bala que mató al menor es la que impactó a su otro hijo de 16 años, quien se encuentra en estado delicado en el hospital Mario Catarino Rivas.

De acuerdo con las declaraciones que dio el dolido padre mientras sepultaba a su hijo, la bala "le entró por la cabeza y le salió y le entró" a su hijo mayor.

"No es fácil lo que le pasó al bebé, fue algo que nadie se lo esperaba, no tengo palabras. A mi bebé le entró la bala por la cabeza y le salió y le entró al más grande", manifestó.

El joven de 16 años tiene la bala incrustada en el cráneo y se encuentra delicado.

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El pequeño Marvin Ebanks murió la madrugada del 1 de enero luego de que sujetos desconocidos protagonizaran una balacera frente a su vivienda y una de las balas le impactó.

En el tiroteo también resultó herido un joven de 16 años, quien es hermano del menor fallecido y quien se encuentra en estado delicado ya que tiene incrustada la bala en su cráneo.



Hasta el momento, se informó que los médicos no saben si pueden realizarle una cirugía para extraer la bala o no ya que se incrustó en una parte sensible del cráneo del joven de 16 años.

Entierro

Este lunes 2 de enero los desgarrados familiares del menor le dieron el último adiós en el cementerio del Barrio Mejía de La Ceiba, Atlántida, al norte de Honduras.

Entre el dolor y la resignación sus padres encomendaron el alma del pequeño a Cristo durante el sepelio.

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