Por temor al brote de COVID-19 y pensando en la salud de sus futbolistas y sus empleados, River Plate decidió que no jugará el encuentro de este sábado frente a Atlético Tucumán, lo que abrió un nuevo foco de disputa con la AFA y la Superliga.
El equipo Millonario tomó la decisión unilateral de retirar el equipo y eso lo llevaría a ser sancionado. Por ahora, la única decisión oficial del Ministerio de Turismo y Deportes y el de Salud es la de realizar los encuentros a puertas cerradas por el coronavirus.
Si River mantiene la idea, le aplicarían el artículo 109° del Reglamento de Transgresiones y Penas de la Asociación del Fútbol Argentino, con un perjuicio deportivo y otro económico para la institución.
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La Banda no solo perdería los tres puntos del partido ante el Decano, sino también otros tres que le restarían en la tabla de posiciones. Es decir, seis en total, acompañados de una multa equivalente a 2250 entradas generales ($1.237.500).
