Las quemaduras son una de las lesiones, por accidente, más frecuentes en niños. Sobre todo las que se deben a agua y líquidos calientes.

¿Qué hacer?

Aunque es muy común que las personas que sufren quemaduras pequeñas no asistan a centros de salud, es clave que sin importar el tamaño sea evaluada por un médico. 

También es importante saber que no se deben utilizar remedios caseros y lo único que se debe hacer es poner la zona afectada debajo del chorro de agua fría o tibia, sin usar hielo ni ninguna otra sustancia porque solo empeorarán la herida y harán más difícil el tratamiento médico.

Es igualmente relevante tener claro que si hay prendas adheridas no deben ser despegadas de la zona sino cubrir con toallas o compresas frías y acudir lo más rápido posible al servicio de urgencias para recibir el tratamiento adecuado.

¿Qué no hacer?

No utilice soluciones diferentes al agua, como leche, sábila, yogur, huevos, vinagre, alcohol, bicarbonato de sodio.

No frote o “refriegue” la herida.

Si la quemadura es por ácido, no sumerja al paciente en agua (piletas, tanques o recipientes llenos de agua), pues la sustancia se puede mezclar y continuar quemando.

No ponga papa, café, cebolla, miel, mantequilla, aceite vegetal o aceite de oliva ni de cocina, vaselina, ni ningún otro remedio casero.

No suministre ningún medicamento, ni cremas, ni proporcione alimentos o bebidas.

No toque ni reviente las ampollas.

Fuente: Globovisión