El presidente de Bolivia, Evo Morales, retó a todos aquellos que lo acusan de haber cometido fraude en los recientes comicios electorales, a que fundamenten con pruebas la acusación, pues está dispuesto a medirse en una segunda vuelta de comprobarse la hipótesis. 

"Si hay fraude, al día siguiente convocamos a la segunda vuelta", dijo desafiando a la comunidad internacional, quien recomendó al mandatario acudir a una segunda vuelta como forma de garantizar la transparencia de las elecciones. 

En vista de la postura fijada por las cancillerías de Colombia, Brasil, Argentina y Estados Unidos, Evo invitó a los representantes de estas naciones a participar en la auditoría que ha propuesto.

El candidato opositor, Carlos Mesa, no sólo desconoció la proclamación de Evo para un cuarto mandato, sino que además rechazó "el cierre del cómputo nacional de las elecciones generales y las consecuencias políticas y jurídicas del mismo, por ser éste el resultado del fraude y el incumplimiento de la voluntad popular". 

El computo del Tribunal Supremo Electoral (TSE) situó a Morales en primer lugar con 47,08% de los votos válidos, mientras que su contrincante, Carlos Mesa, obtuvo el 36,51%. 

Morales se reeligió gracias a una sentencia del Tribunal Constitucional de Bolivia pese a que la Constitución establece que una persona no puede gobernar por más de dos periodos consecutivos y que el mandatario perdió un referendo en 2016 en el cual intentó anular esa limitación. Globovision