Los jóvenes de Salas Evangélicas han realizado diferentes voluntariados que han favorecido a miles de niños y adultos oriundos de lugares en los que difícilmente se tiene acceso a la educación o a la salud.

La donación de útiles escolares, se ha acompañado con el regalo de juguetes, de ropa y, sin dejar atrás lo más importante, con la enseñanza del amor de Jesús.

Los jóvenes también han realizado nueve brigadas médicas en las que han atendido a mil 301 hondureños que no podían acceder a un centro de salud.

Dibujando Sonrisas brindó consultas médicas generales, en las cuales, los pacientes recibieron medicamentos gratis según sus diagnósticos.

Los voluntarios brindan medicamentos gratis en las brigadas. Foto: Cortesía
Los voluntarios brindan medicamentos gratis en las brigadas. Foto: Cortesía

En las brigadas, los jóvenes de Salas Evangélicas aprovechan para donar ropa que fue previamente recolectada.

Los voluntarios donan ropa y realizan actividades para niños en las brigadas médicas. Foto: Cortesía
Los voluntarios donan ropa y realizan actividades para niños en las brigadas médicas. Foto: Cortesía

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Conformación del grupo

Dibujando Sonrisas es un proyecto que comenzó en 2021 con el fin de repartir alegrías a los infantes de los sectores que fueron afectados por uno de los fenómenos naturales más devastadores que ha sufrido Honduras en los últimos años: los huracanes ETA e IOTA, mismos que se registraron entre el 1 y 16 de noviembre del 2020.

Actualmente, Dibujando Sonrisas está formado por más de 30 voluntarios que cursan diferentes carreras universitarias y otros recién graduados.

Los jóvenes son de las carreras: Medicina, Enfermería, Odontología, Informática y las Ingenierías Industrial, Eléctrica y Mecánica, unos estudiantes y otros ya egresados.

El grupo de voluntarios comparte la palabra de Dios cuando realizan sus causas sociales. Foto: Cortesía
El grupo de voluntarios comparte la palabra de Dios cuando realizan sus causas sociales. Foto: Cortesía

Zonas que visitan

Dibujando Sonrisas realiza los voluntariados en las zonas más remotas de Honduras, en los que no existen centros de salud.

Dios como motivación

Su propósito se basa en un versículo de la Biblia: Jeremías 33:6, el cual dice "He aquí que yo les traeré sanidad y medicina; y los curaré, y les revelaré abundancia de paz y de verdad".

Los jóvenes de Salas Evangélicas también se inspiran en una frase del escritor estadounidense, Max Lucado,: "Ninguno de nosotros puede ayudar a todos. Pero todos podemos ayudar a alguien. Y cuando les ayudamos, servimos a Jesús".

En las brigadas médicas, los jóvenes de Salas Evangélicas han ayudado a más de 1,300 personas. Foto: Cortesía
Los jóvenes de Salas Evangélicas han ayudado a miles de personas. Foto: Cortesía

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