• Supermercados, ferreterías, funerarias y entidades de gobierno y socorro han registrado casos positivos del nuevo virus.

El nuevo virus se propaga rápidamente entre los colaboradores de diversas empresas, negocios, organismos estatales y entidades de socorro.

En las últimas 24 horas, dos empleados de la Asociación de Funerarias dieron positivo por Covid 19 y se encuentran en cuarentena en San Pedro Sula.

También se dio cuenta que tres voluntarios de la Cruz Roja en la zona norte están contagiados por el patógeno que ataca al sistema respiratorio y produce neumonía.

Afortunadamente los pacientes de la institución de socorro están casi saliendo de la crisis, confirmaron directivos de la organización de auxilio a través de HRN.

Suma y sigue: Las autoridades de la Empresa Nacional Portuaria confirmaron que cinco empleados de la dependencia estatal fueron infectados por el nuevo virus.

En los primeros días de esta semana se informó que un colaborador de una conocida ferretería de la capital resultó positivo a la prueba de covid-19 y el mismo diagnóstico fue dado a un empleado del Sistema de Emergencia 911 en San Pedro Sula.

Se recuerda que la semana pasada, una cadena de supermercados del Distrito Central emitió un comunicado para reportar un cuadro de infección entre sus colaboradores.

Cortés y Francisco Morazán siguen siendo los principales núcleos de propagación del virus. En cuestión de horas, Honduras llegará a los 2,000 casos confirmados y ya sobrepasó la barrera de los cien fallecidos.

El país ha evolucionado hacia una nueva fase más peligrosa en la diseminación de la pandemia, a través del contagio comunitario y la presencia del virus “en todas partes”.

El aumento en el número de pruebas ha hecho posible identificar más casos positivos, pero no es suficiente para contrarrestar la fuerza de la peste, aplanar la curva de incidencia y evitar que se multipliquen las muertes.

El índice actual de letalidad es de seis por ciento, mientras que la relación de los pacientes recuperados es de diez por cada cien infectados, de conformidad con los datos dados a conocer por el Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (SINAGER).

Mientras la población no asuma con responsabilidad las medidas de contención de la pandemia, Honduras no tiene un diagnóstico positivo para salir de esta plaga.

El país está en la encrucijada de poner en marcha disposiciones salomónicas que pongan a buen resguardo la vida de la población, y que salven de la muerte la economía nacional, lo que traería más pobreza y subdesarrollo.