Marco Tulio Solórzano fue hallado muerto la noche del 7 de enero en la residencia del empresario Roy Dilbert. Este último había sido reportado desaparecido por su hijo desde el 5 de enero, tras partir en lancha desde Omoa hacia Islas de la Bahía. Sin embargo, Dilbert fue encontrado con vida por un guardacostas en la zona insular del país.
La DPI, tras recibir la denuncia de desaparición de Dilbert, inspeccionó su domicilio y encontró el cuerpo de Marco Tulio.
El difunto trabajaba como prestamista en un banco hondureño y, al parecer, tenía previsto reunirse con el empresario.
De acuerdo con el informe policial y datos de Medicina Forense, Marco Tulio recibió dos golpes en la cabeza.
"El empresario es el principal sospechoso, ya que citó al hombre en su vivienda. La Fiscalía está al tanto del caso. A pesar de que no se encontró a Dilbert en flagrancia, no se pudo proceder legalmente contra él. Sin embargo, la DPI continúa investigando el crimen", explicó Belkis Valladares, portavoz de la DPI.
Según declaraciones del hermano de Solorzano a un medio local, acusa al empresario del crimen. Reveló que en sus últimos momentos, Marco Tulio le envió mensajes en redes sociales diciendo: "Sigo aquí", "No me dejan salir".
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