En siete por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), se mantendrá el gasto tributario de Honduras en el período 2019-2020, según se desprende de la proyección del Gabinete Económico.
Los gastos tributarios son los ingresos que el Estado deja de percibir, porque son otorgadas concesiones que benefician a algunos contribuyentes y que respaldan actividades que tienen por objeto el financiamiento de determinadas políticas públicas.
Un documento de la cartera ministerial de Finanzas reza que las perspectivas para el corte de 2019 y el año entrante están basadas en que el gasto tributario represente siempre el siete por ciento del PIB, considerando el marco legal vigente.
El mismo análisis pone de relieve que, al término de 2019, el gasto tributario será de 42,800 millones de lempiras, distribuidos en unas nueve materias.
El mayor flujo irá para los renglones de la Administración Pública y Defensa y planes de seguridad social, comercio, gastos por mantenimiento del parque vehicular, electricidad, industria hotelera y manufacturera, intermediación financiera, construcción, servicios de enseñanza, agricultura, ganadería, silvicultura y pesca.
Para 2020 se prevé que el gasto tributario en estas mismas líneas de acción tenga un incremento del siete por ciento. La cifra será de 46,100 millones de lempiras.
Los funcionarios que están a cargo de manejar la hacienda han detallado que si se toma en cuenta la distribución del gasto por tipo de tributo, se obtiene que el Impuesto sobre Ventas tendrá la mayor participación si no se realizan cambios en la política fiscal sobre la estructura actual.
Igualmente, se ha explicado que si es analizado el comportamiento del gasto tributario en cada sector, excluyendo el Impuesto sobre Ventas, entonces los regímenes especiales de exportaciones son el rubro que recibirá la mayor contribución.
