Se estima que la ENEE dejará de recibir alrededor de 200 millones de lempiras luego que el Poder Ejecutivo dejó sin efecto el alza tarifaria que había acordado la Comisión Reguladora de Energía Eléctrica (CREE).

Los comisionados aprobaron un pliego que contenía la imposición de un incremento entre el ocho y el 11 por ciento por consumo de energía eléctrica en el trimestre julio-septiembre.

El retroceso que se dio en dicho sentido, ha sido calificado por amplios sectores como "una jugada política", "un movimiento preconcebido" y una "respuesta populista" a un anunciado golpe al bolsillo de la población, a las puertas de las elecciones generales de noviembre.

Al margen de los elementos políticos que hayan motivado la suspensión del aumento en el valor del consumo de energía eléctrica, su vigencia a partir del 1 de julio hubiera sido un "trancazo" para los abonados de todas las categorías.

Hubiese representado un revés a los consumidores, dado que el encarecimiento del servicio de energía eléctrica provoca un efecto en espiral en la inflación y efectos negativos sobre el aparato productivo y la economía en general.

Cabe resaltar los argumentos que los comisionados de Regulación de Energía Eléctrica esgrimieron para plantear las nuevas tarifas que se habían fijado para los meses de julio, agosto y septiembre, y cuya vigencia fue finalmente aplazada.

Uno de tales factores está relacionado con la apertura de la economía del país que ha llevado al aumento de la cartera de compras de la energía por encima de lo previsto.

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Los burócratas de la CREE explicaron que, en el caso de la generación de origen térmico y como resultado del incremento en el precio de los combustibles, hay que reconocer a favor de la ENEE los costos adicionales incurridos para la contratación de potencia.

Con base en tales márgenes y en apego al indicador que establece una revaluación de 0.62 por ciento del lempira frente al dólar, es que se había proyectado un ajuste promedio de más de nueve por ciento.

Por otra parte, se tomó en cuenta el precio medio del barril del petróleo de 57 dólares y la demanda interna de energía eléctrica arriba de los 1,700 megavatios, que no se había registrado antes y que ha empujado el alza en los costos producción para responder a dichas necesidades, según las justificaciones presentadas por la CREE.

Hasta mayo de 2021, la ENEE sumó ingresos acumulados por 10,700 millones de lempiras en concepto de facturación a partir de la aplicación de tarifas entre 3. 56 lempiras y 4.64 lempiras por cada kilovatio-hora.

Para los entendidos en la materia, es fundamental un plan energético y una renegociación con los generadores privados y con la Empresa Energía Honduras, además de una estrategia de rescate de la institución.

La empresa lleva varios años de No realizar inversiones para su fortalecimiento y expansión, y muchas décadas de operar en precariedad. Hay que actuar pronto, coinciden los conocedores de la asignatura energética que es vital para el desarrollo del país.

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