Según informes de testigos que alertaron a las autoridades, la víctima sería un supuesto asaltante que frecuentaba la zona y había perpetrado robos a automovilistas con ventanas abiertas en más de una ocasión.
Vecinos y dueños de negocios en el área informaron que el hombre había cometido asaltos el pasado viernes y, nuevamente este martes, llevó a cabo acciones delictivas. Aseguran que la persona que le quitó la vida, aún no identificada, actuó en defensa propia.
Un testigo relató a las autoridades que el presunto ladrón, momentos antes de su muerte, estaba amenazando a una posible víctima, quien respondió disparándole para repeler el asalto.
"Bajá el vidrio", le habría gritado la víctima mientras apuntaba con un arma 9 mm, pero la persona que le quitó la vida fue más rápida y disparó.
La Dirección Policial de Investigaciones (DPI) y Medicina Forense llegaron al lugar del incidente, donde llevaron a cabo las investigaciones correspondientes y procedieron al levantamiento del cadáver para trasladarlo a la morgue en Tegucigalpa.
En la escena, las autoridades encontraron junto al cuerpo el arma de fuego que presumiblemente fue utilizada en los asaltos, confirmando la versión de defensa propia presentada por los testigos. Este trágico incidente destaca la complejidad y peligrosidad de situaciones de este tipo, donde la violencia surge como respuesta a acciones delictivas.
Los homicidios son la principal causa de muerte en el país, según el Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (OV-UNAH).
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