Más de cinco millones de hondureños han sido convocados para ejercer el sufragio el domingo (28.11.2021) para elegir al presidente, designados, 128 diputados y 298 alcaldes y corporaciones municipales.
Los politólogos, a quienes se ha solicitado su lectura del actual proceso comicial, son de la opinión que la clave está en que los votantes acudan en masa para darle legitimidad a la consulta.
Ocurre que en los últimos procesos de consulta, menos del 30 por ciento de los empadronados son los que han elegido a las autoridades del país, una constante que se ha traducido en la progresiva pérdida de legitimidad.
Con fundamento en el comportamiento mostrado por los electores en las justas anteriores, se estima que el abstencionismo podría alcanzar el mismo nivel promedio de 50 por ciento o más si no se realiza una campaña de concienciación de los ciudadanos, dirigida a que la nueva cita con las urnas sea masiva.
Se trata de que la afluencia a las Juntas de Recepción de Votos no sea menor al padrón de hondureños convocados a elegir por mayoría a quienes dirigirán el destino de Honduras en el período 2022-2026.
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Los funcionarios del más alto rango del Consejo Nacional Electoral han llamado a que los ciudadanos no dejen de cumplir su deber cívico, entendido que es el pilar de la democracia participativa.
Los analistas y figuras principales de los organismos de la sociedad civil, interpretan que el poder de las mayorías, el Estado de Derecho y la institucionalidad de Honduras únicamente va a adquirir autenticidad, mediante una fuerte y contundente participación de los votantes.
Vencer el abstencionismo
Además de enterrar todos los riesgos de fraude, la asistencia de los hondureños a los centros de votación le da mayor fundamento a los partidos, coloca en escrutinio a los políticos y reivindica la ciudadanía.
Los partidos políticos, las organizaciones no gubernamentales y los medios de comunicación sostienen una campaña tendiente a que los ciudadanos entiendan todo el concepto de participar en la fiesta cívico democrática programada para este domingo 28 de noviembre.
El reto es vencer el abstencionismo, porque el voto de cada hondureño cuenta para la construcción de un plan de nación que haga posible enrumbar al país hacia la ruta correcta. ¿O seguirá prevaleciendo en Honduras la democracia puramente electorera, la falta de compromiso de los políticos y el ejercicio de un poder carente de legitimidad.
