Como es tradición, los hondureños a medianoche revientan cohetes y lanzan luces artificiales para celebrar la Navidad, fecha en que el cristianismo conmemora el nacimiento de Jesucristo.
La pólvora se escuchó en las calles de las ciudades más importantes de Honduras desde tempranas horas del 24 de diciembre, fecha en que se celebra la víspera de la Navidad.
A medida pasó la noche, el estruendo de los cohetes se acentuó más y fue faltando pocos minutos para las 12:00 de la noche cuando se pronunció más el ruido de estos, así como las luces en el cielo catracho.
La emoción se prolongó por más de media hora y a medida fue entrando la madrugada el bullicio por la pólvora fue reduciendo, aunque las celebraciones en los hogares continuó.
Sin embargo, la preocupación se mantiene latente debido al uso de la pólvora entre los menores de edad, pese al llamado de las autoridades municipales y estatales para evitarlo.
Y es que, hasta la fecha en el país se registran siete menores con quemaduras producto del uso de la pólvora, cuyas edades oscilan entre los 7 y los 17 años de edad.
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