Jefferson Meléndez, exjugador de las reservas del Real España, y quien hace unas semanas se dio a conocer que permanecía secuestrado en México, en su travesía hacia Estados Unidos, fue liberado hace unos días y regresó a su natal Sambo Creek, La Ceiba, Atlántida.
"La decisión de viajar la tomé por ver cómo pasaban muchas cosas, al estar sentado y ver que tus hijos necesitan algo, lo hice por necesidad", explicó Meléndez en una entrevista a Diario Diez.
El joven militó en las reservas del Real España durante dos años, ascendió al primer equipo, pero no concibió debutar, así que lo enviaron a préstamo a un equipo de Liga de Ascenso, donde tampoco encontró cupo.
"Llegó un límite donde dije, 'el futbol ya no es para mí' de la pura decepción, había ido a algunos equipos, pero después no te toman en cuenta, se me bajaron los brazos".
Con 21 años, y dos hijas pequeñas decidió que irse era su mejor opción, expresó el joven. Sin embargo, a los días de haber emprendido su viaje, el joven fue raptado junto con un amigo en México, así lo informaron sus familiares.
"Solo pensé en mis dos hijos, en mi mente venían muchos pensamientos, estaba llorando. Nos enchacharon, hacía mucho calor y el piso parecía piscina porque derramábamos muchas lágrimas hasta donde no habían, pensé en la muerte, llamaron a mi madre y le dije que me habían secuestrado, su respuesta fue, 'Ay Dios mío'". Lamentó Meléndez.
Los presuntos secuestradores pedían 10 mil dólares para el rescate, cantidad con la que sus familiares no contaban.
"Ella me decía en garífuna 'ubati sensu' no tengo dinero, en ese momento me entró escalofríos porque ellos habían dicho que si no pagaban nos iban a matar".
Luego de esta experiencia el exjugador asegura que no volvería a emprender ese viaje y que se quedará en Honduras para buscar oportunidades como futbolista tratando de llegar a la Liga Nacional para cumplir sus sueños.
