Con la voz más serena que de costumbre, el presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, hizo un llamado contundente el sábado por la noche a sus connacionales para que adopten las medidas de prevención y seguridad dictadas por su gobierno ante la pandemia por coronavirus, al catalogar que "las próximas horas y los próximos días son de vida o muerte".
El país centroamericano tiene 26 casos confirmados por covid-19 hasta el sábado, según el último recuento del Sistema Nacional de Riesgos y Emergencias (Sinager), pero tiene varios cientos de casos en observación y sospecha por contagio de este mortal virus.
"Quédense en casa, porque la amenaza es mortal. Las decisiones que hemos tomado son para ganar esta guerra", resumió Hernández en su comparecencia.
El mandatario aprovechó un mensaje en cadena nacional, para desglosar el abastecimiento que en las últimas horas se le ha hecho al sistema sanitario de Honduras, que incluye la contratación de 2 mil 728 personas entre médicos, microbiólogos, técnicos laboratoristas y enfermeros.
Según el presidente, este nuevo personal sanitario tendrá un costo de 65 millones de lempiras al mes.
A su vez, Juan Orlando Hernández dio a conocer que ya se obtuvo un segundo lote de 400 pruebas de covid-19 mediante la Organización Mundial de Salud (OMS) y la Organización Panamericana de Salud (OPS), además de 230 respiradores y succionadores para atender la emergencia.
Hernández explicó que esto es parte de la primera etapa del plan de salida para el cual se habilitaron más de mil 200 millones de lempiras hace una semana, que incluirá la construcción de 96 centros médicos -según dijo ya hay 28 en todo el país, aunque seguramente todos provisionales, como la Villa Olímpica, que, dicho sea de paso, dijo que se construyó allí por sugerencia de la OMS, por "considerarla un lugar idóneo" para evaluar y descartar casos.
Finalmente, dijo que, en las próximas 24 horas, todos los centros médico-hospitalarios del país serán equipados con mascarillas N95, gafas biomédicas, botas y todo el material de bioseguridad que necesitan los "guerreros", como catalogó al personal sanitario hondureño.
"Tengo la fe en Dios que no será fácil, pero vencemos", cerró.
Además: Honduras eleva a 26 los contagios por covid-19 tras dar positivos dos mujeres el sábado
