Un internauta publicó en TikTok un video de frutos comestibles que crecieron en un camposanto y, a raíz de ello, decenas de usuarios empezaron a tener la duda de qué pasa si comes una fruta del cementerio.
En dicha grabación, que ha alcanzado más de 3.9 millones de reproducciones, se puede apreciar un árbol de mango en un camposanto del que, hasta el momento, se desconoce su ubicación exacta.
Al respecto, diversos cibernautas comentaron algunas experiencias sobre consumir comestibles que fueron cultivados en un panteón.
"Una vecina me dijo que un día comió mamones de un árbol de un cementerio y se hinchó a tal punto que quedó irreconocible; su esposo la llevó de urgencia a la clínica porque era una alergia horrible que tenia... A decir verdad, no sé a qué se deba, pero no les recomiendo comer frutas de cementerio", manifestó una internauta.
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"Cuando tenía como 10 años andaba visitando la tumba de un tío con mi familia y cerca de la tumba hay un árbol de tamarindo, estaba en su época ya maduros y empecé a comer (...) desde ese momento me puse malo del estómago, todo lo que comía lo vomitaba; en el estómago no me paraba nada, solo el agua (...) nadie sabía lo que me pasaba hasta que yo dije que en el cementerio había comido esa fruta de tamarindo (...) desde ese entonces nunca más volví a comer nada del cementerio", comentó otro usuario.
Otros usuarios, por su parte, señalaron que no pasa nada si una persona come fruta del cementerio, pues, según argumentan "las frutas son fruta, en el cementerio, el campo o en la maceta, su composición es la misma".
¿Qué pasa si comes una fruta del cementerio?
Especialistas recomiendan que las personas no coman alimentos en cementerios debido a la poca higiene del lugar, lo cual podría provocar enfermedades gastrointestinales agudas, según diversos portales.
Según estos portales informativos, como Informador y Noroeste, un camposanto no es zona ideal para comer ni preparar alimentos debido a que en ellos abundan restos de insectos, heces, bacterias y microorganismos que intervienen en la descomposición de cuerpos.
Todos estos restos pueden alcanzar los comestibles de las personas y, en consiguiente, podría desarrollar problemas de salud.
Con respecto a las frutas de cementerios, algunos portales, en base a declaraciones de personas que cultivan en dicho lugar, destacan que estos comestibles son como los que crecer en cualquier otro lugar, por lo que no son dañinos.
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