Previo a la repetición de su juicio oral y público, el martes (01.02.2022), la ex primera dama Rosa Elena Bonilla de Lobo, investigada por corrupción, se mostró esperanzada en que "se me haga justicia" y expresó que su juicio inicial "se desarrolló con ilegalidad".

"Voy a demostrar que yo no tomé nada. Yo sé que los jueces han sido presionados, pero vamos a una nueva etapa, con un nuevo Tribunal", dijo a medios de comunicación previo a ingresar a las instalaciones de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), en Tegucigalpa, capital de Honduras, al filo de las 9:00 de la mañana del martes.

De igual modo, aseguró estar entusiasmada por "esta nueva posibilidad de defenderme".

A Bonilla, esposa del expresidente Porfirio Lobo (2010-2014), el Tribunal de Sentencia la condenó a 58 años de prisión en septiembre de 2019, luego de que la encontró culpable de fraude y apropiación indebida.

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Sin embargo, en marzo de 2020, la Corte declaró "ha lugar" dos recursos de amparo presentados por su defensa y ordenó la repetición de su juicio, por lo que en julio de ese año quedó liberada.

"Voy a explicar qué pasó. Antes tenía el dedo puesto encima pero, gracias a Dios, ya se fue Juan Orlando Hernández […]", arguyó con tono irónico.

Bonilla señaló que no sabe qué sucedió con su juicio, pues, según expresó, "se desarrolló con total ilegalidad […]". "Sabemos que a veces hay presiones", apuntó.

A raíz de problemas de salud por parte de la imputada, la repetición de su juicio oral y público había sido suspendida en dos ocasiones previas, primero en julio y después en agosto de 2021.

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