En las últimas 24 horas, tres menores fueron hospitalizados por quemaduras causadas por la manipulación de pólvora. Uno de los incidentes tuvo lugar en San Pedro Sula, Cortés, donde una niña de 12 años resultó lesionada al manipular un mortero.
En la misma región, un adolescente de 15 años también ingresó de emergencia al Hospital Mario Catarino Rivas por quemaduras ocasionadas por la explosión de un mortero.
Ambos menores se encuentran en estado estable, según informó Alfredo Ortíz, portavoz del Centro Hondureño para el Niño Quemado (Fundaniquem). Sin embargo, debido a las quemaduras, presentan delicadas lesiones en algunas de sus extremidades superiores e inferiores.
En otro incidente registrado esta madrugada, un menor de 11 años ingresó a Fundaniquem después de que un mortero explotara en su mano izquierda, causándole severos daños en dicha extremidad. Según Ortíz, los médicos están haciendo todo lo posible para evitar la amputación.
Fundaniquem informó que la mayoría de los casos registrados provienen de las zonas norte y occidente de Honduras.
En el Distrito Central, la alcaldía está imponiendo multas a los padres de familia que permiten que sus hijos utilicen artefactos de pólvora. La multa para un padre podría ascender a L5,000. Además, aquellos que vendan o distribuyan estos artículos pueden enfrentar multas de hasta L60,000, además del decomiso de la mercancía.
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