Tony, actualmente tiene siete años, y los médicos le amputaron sus piernas al mes de vida debido a las crueles fracturas que tenía ante los maltratos físicos de parte de sus padres biológicos.
El menor ingresó en 2014 al Hospital Infantil Evelina London en Southwark, al sureste de Londres, con múltiples fracturas, fallo orgánico múltiple y sepsis, por los fuertes abusos que recibió de sus progenitores.
Tras salir del hospital, Tony fue adoptado por una pareja que inició una campaña para que las condenas para los abusadores de menores sean por más tiempo.
VEA: Niño fue asesinado junto a su perro por comando armado en México
A su vez, sus padres adoptivos, Paula y Mark Hudgell, hicieron una campaña para recaudar fondos con los que ayudan a hospitales y a organizaciones que apoyan a niños maltratados.
Fantastic end to #CaptainTom100 challenge 100 steps smashed with over 500 completed & an incredible over 70K raised for @EvelinaLondon
Forever grateful @captaintommoore for inspiring our boy to walk 💙
Thank you to everyone who has donated & supporting our 🐻#GoTonyGo pic.twitter.com/IRAFwvTSWJ
— Tony Hudgell BCyA BEAR @bearsjourney (@paula_hudgell) May 3, 2021
El infante tiene problemas con las manos y no escucha del oído derecho. Pero aún así, a pesar de todo eso, "hoy es un niño brillante, feliz y seguro de sí mismo, que ama la vida", dijo su mamá, Paula.
"Ley Tony"
Jody Simpson y Tony Smith, padres del niño, fueron sentenciados en 2018 a 10 años de prisión cada uno, pero debido a la "Ley Tony" su condena podría ser de cadena perpetua, según informó el portal Antena 3.
Los delitos de causar o permitir daño físico grave a un niño o menor, también aumentan sus penas, de 14 a 16 años de prisión, de acuerdo con la información de Antena.
Inglaterra también ha establecido reformas en la atención social para contratar a más cuidadores adoptivos, aumentar el apoyo a los trabajadores sociales y mejorar los estándares profesionales de quienes trabajan en el sector.
TAMBIÉN: Delincuente armado aprovecha el tráfico y asalta a conductor, todo quedó grabado