Durante el período fiscal 2020, el Gobierno destinará 42,000 millones de lempiras para cubrir el servicio de deuda pública. En la partida presupuestaria vigente está incluida para el mismo fin una suma de 38,000 millones de lempiras.

Esto significa que en el lapso entre 2019 y 2020, el pago del endeudamiento experimentará un incremento de 4,000 millones de lempiras, una carga que es calificada como "desproporcionada" por los expertos en finanzas.

De acuerdo con la relación establecida por los entendidos en el manejo de los recursos del Estado, uno de cada cuatro lempiras del plan de ingresos y gastos está dirigido a cancelar el endeudamiento.

Entre 2010 y 2018, el porcentaje de la deuda pública respeto al Producto Interno Bruto (PIB), se ha incrementado de manera inmoderada en 17 puntos. Ha ido de 24 por ciento a 41 por ciento. A la fecha el endeudamiento público roza el 50 por ciento del PIB.

Los economistas consultados concluyen que el país no tiene capacidad para seguir asumiendo tales riesgos, puesto que -entre mayores compromisos- más estrecho es el margen de recursos que puede destinar para las áreas importantes de educación, salud, seguridad social y reducción de la pobreza.

Un documento de la Secretaría de Finanzas señala: Si bien es cierto en el corto y mediano plazo la deuda externa se vislumbra sostenible en cuanto a los indicadores del valor presente, el servicio del endeudamiento se ve sobrepasado para 2020 si son utilizados los supuestos del escenario base; es decir, un aumento desmesurado en condiciones de mercado.

Esto podría ocasionar un problema de "no pago" del servicio de la deuda externa. No menos cierto es que si continúa el crecimiento de la contratación de deuda externa en términos menos favorables, sumado al estancamiento de la economía, la sostenibilidad de este compromiso se vería comprometida en el mediano término.

Los análisis del Gabinete Económico subrayan que se hace necesario tomar las acciones necesarias para encaminar al país hacia un crecimiento económico robusto y constante.

Los empresarios y los entendidos en finanzas coinciden en que Honduras debe adoptar disposiciones que garanticen un endeudamiento controlado y sostenible.

A junio de 2019, la deuda externa se contabilizaba en 6,955 millones de dólares y la interna ascendía a 4,600 millones de dólares para totalizar más de 11,600 millones de dólares, aunque las valoraciones de organismos de la sociedad civil estiman que el endeudamiento del país llega a 15,000 millones de dólares.