Un niño de 8 años falleció aplastado por una pared de su casa que cedió luego que minutos antes del suceso se registrara una fuerte lluvia acompañada por vientos huracanados en el sector de Naco en el departamento de Cortés, al norte de Honduras.
De acuerdo con relato de parientes a medios nacionales, el pequeño identificado como Diddier Quiroz, se encontraba en su cuarto, al momento que decidió salir de su habitación a minutos de haberse registrado los vientos huracanados.
En ese instante, se desplomó un árbol sobre la casa, cayendo la pared que aplastó al menor, quien gravemente herido fue trasladado hasta el Hospital Mario Catarino Rivas, donade falleció.
La madre del pequeño resultó con heridas producto de los restos de las paredes que le cayeron.
El menor fue sepultado este jueves 15 de julio de 2021 en un cementerio ubicado en Támara, en esa jurisdicción de la zona norte.
Varias casas del sector resultaron afectadas por el paso de los vientos huracanados acompañados de intensas lluvias.