En la búsqueda de confort dentro del hogar, el uso del aire acondicionado se convierte en un aliado esencial durante los meses más calurosos, especialmente ante la reciente ola de calor, por lo que expertos recomiendan utilizarlo en temperaturas que rondan los 24 y 25 grados Celcius.

Sin embargo, su operación continua puede representar un aumento significativo en la factura de electricidad. Para contrarrestar este efecto, es crucial adoptar medidas que optimicen su uso y aumenten la eficiencia energética.

Así las cosas, establecer hábitos adecuados y realizar ajustes en el funcionamiento del sistema puede llevar a un ahorro considerable de energía y dinero, sin sacrificar el confort.

Consejos para un uso eficiente del aire acondicionado:

Ajuste el termostato: Mantener el aire en unos 24-25 grados Celsius es ideal. Evite bajarlo demasiado; por cada grado que reduce, aumenta el consumo de energía.

Uso de temporizadores: Utilice los temporizadores para apagar el aire acondicionado automáticamente cuando no sea necesario, especialmente por la noche o cuando la casa esté vacía.

Mantenimiento regular: Asegúrese de que el aire acondicionado reciba mantenimiento regularmente. Limpiar los filtros y revisar el sistema puede mejorar su eficiencia y prolongar su vida útil.

Sellado y aislamiento: Asegure que su hogar esté bien aislado y selle cualquier rendija por donde pueda escapar el aire frío. Esto reduce la carga de trabajo del aire acondicionado.

Ventiladores de techo: Use ventiladores de techo junto con el aire acondicionado para distribuir el aire frío de manera más eficiente por toda la habitación, lo que puede permitirte subir el termostato un par de grados.

Evite el calor del sol: Durante las horas más calurosas, cierre cortinas y persianas para bloquear la luz solar directa, lo que puede calentar los ambientes y hacer que el aire acondicionado trabaje más.

Ubicación del termostato: Asegúrese de que el termostato no esté cerca de lámparas, televisores u otros aparatos que generen calor, ya que esto podría hacer que el aire acondicionado funcione más tiempo de lo necesario.

Optimización del espacio: Cierre las puertas y ventanas de las habitaciones que no esté utilizando para no enfriar zonas innecesarias.

Inversiones inteligentes: Considere invertir en un equipo de ventilación de alta eficiencia si el suyo es muy antiguo. Los modelos más nuevos suelen ser más eficientes y gastan menos energía.

Uso de cortinas térmicas: Instale cortinas térmicas que ayudan a mantener el ambiente fresco bloqueando el calor externo durante el verano y conservando el calor interior durante el invierno.

El beneficio del uso sostenible

Implementar estos consejos no solo beneficiará su bolsillo, sino que también contribuirá a la sostenibilidad ambiental, pues al optimizar el uso del aparatos de enfriamiento, se reduce la demanda energética y, por ende, disminuye la emisión de gases contaminantes.

Es un pequeño esfuerzo individual que tiene un gran impacto colectivo.

Finalmente, tomar medidas para usar eficientemente el aire acondicionado es un paso hacia un estilo de vida más consciente y responsable.

(Artículo de Javier Álvarez con el apoyo de la Inteligencia Artificial).