La Secretaría de Gestión de Riesgos y Contingencias (Copeco) emitió un comunicado en el que se detallan las medidas de precaución y las áreas afectadas por esta situación crítica. Estos eventos han puesto en riesgo a la población y requieren una atención inmediata por parte de las autoridades.
Además, se emitió alerta verde en los departamentos de Copán, Intibucá. Ocotepeque y Lempira, ubicados en la zona occidental del país.
Mientras tanto, los departamentos de Yoro, Olancho, Islas de la Bahía, Colón, Atlántida, Cortés, Santa Bárbara, Gracias a Dios, El Paraíso, Francisco Morazán, La Paz, Comayagua, Choluteca y parte de Valle, han sido colocados en alerta amarilla, aunque los últimos dos previamente se encontraban en alerta roja, debido al paso de la tormenta Pilar.
Estas medidas estarán vigentes durante un período de 24 horas desde este jueves a partir de las 6:00 de la tarde hasta el viernes a la misma hora.
El riesgo
La decisión de elevar el nivel de alerta en el país se debe a la saturación del suelo debido a las intensas lluvias provocadas por el frente frío en todo el territorio nacional, lo que ha llevado a desbordamientos de ríos, quebradas y riachuelos, así como inundaciones en las áreas declaradas en alerta roja y amarilla.
Según el Centro Nacional de Estudios Atmosféricos Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos), el frente frío ha traído consigo una masa de aire frío que ha provocado condiciones nubosas, vientos fuertes y oleaje alterado en el Caribe.
Además, ha dejado una disminución de la temperatura y precipitaciones en la mayoría de las regiones del país, con acumulados de lluvia más significativos en las regiones norte, noroccidente e insular. En la región sur, se esperan lluvias débiles a moderadas debido al transporte de humedad desde el océano Pacífico.
Las recomendaciones a la población
Copeco reitera el llamado a la población a tomar medidas preventivas. Esto incluye abrigar a niños y adultos mayores, asegurar techos ante la posibilidad de vientos racheados y lluvias fuertes, y realizar la limpieza de cunetas y tragantes para evitar inundaciones en los alrededores.
Aquellos ciudadanos que habitan en zonas vulnerables a deslizamientos, inundaciones, deslaves y derrumbes deben tomar medidas adicionales de prevención y precaución.
De igual manera, se emitió una advertencia para no cruzar ríos, quebradas y vados con niveles altos, y se recomienda identificar rutas de evacuación en caso de una amenaza inminente.
Por otro lado, las actividades de pesca y navegación con embarcaciones de bajo y pequeño calado en la zona del Caribe hondureño se han suspendido debido a la posibilidad de oleajes altos. Se ha solicitado a las capitanías de puertos que realicen la regulación correspondiente.
(Artículo de Javier Álvarez con el apoyo de la Inteligencia Artificial).
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