Según la explicación de las autoridades municipales, el pequeño se encontraba recolectando basura cuando, por desgracia, encontró un mortero que explotó en una de sus manos.
Posterior al incidente, el padre llevó al niño al hospital para recibir atención médica. No obstante, al enterarse de que enfrentaría una multa, optó por huir, impidiendo así que su hijo recibiera el debido cuidado.
Por este motivo, la Policía Nacional se sumará a la búsqueda del padre para que comparezca ante el Departamento Municipal de Justicia y aclare lo sucedido con el menor.
Cabe mencionar que la ordenanza municipal establece multas para los padres que permitan el uso de pólvora a sus hijos, con montos de hasta L5,000, y luego remite los casos a la Fiscalía de la Niñez.
Además, la misma ordenanza prevé sanciones para los comerciantes de productos fabricados con pólvora. Estos pueden enfrentar decomisos, destrucción de productos, multas que oscilan entre L5,000 y L60,000 lempiras, dependiendo de la cantidad de artefactos, y la posibilidad de realizar trabajo comunitario.
En Nochebuena, al menos 12 menores de edad resultaron quemados por el uso de pólvora en las zonas centro y norte de Honduras. El Centro Hondureño para el Niño Quemado (Fundaniquem), informó que recibió la noticia de un menor que sufrió quemaduras en el rostro en Comayagua. El padre, sin dar explicaciones, retiró al niño de la sala de emergencias.
A cinco días de finalizar 2023, Fundaniquem hace un llamado a los padres de familia para que supervisen el uso de pólvora por parte de sus hijos y eviten más tragedias de este tipo.
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