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El Consejo Nacional Anticorrupción (CNA) presentó este jueves 21 de noviembre una denuncia ante el Ministerio Público por la compra irregular de pupitres, lo que constituyó en un "despilfarro" superior a los 8 millones de lempiras.



Los señalados por el ente investigador son el titular de la Secretaría de Educación, Daniel Esponda, y una comisión evaluadora de esa entidad. 



La comisión es integrada por Kilver Eveny Carranza Maradiaga, Alvar Alejandro Santos García y Melvin David Núñez Baca.



La denuncia se presenta el mismo día en que se oficializó que <a href="https://www.radiohrn.hn/honduras-no-califica-nuevamente-para-la-cuenta-del-milenio-por-bajo-desempeno-en-corrupcion-2024-11-21" target="_blank" rel="noreferrer noopener">Honduras no calificó&nbsp;para recibir fondos de cooperación de la Cuenta del Milenio</a>. 



Según la investigación, la Secretaría de Educación realizó una compra irregular de pupitres, pagándose más de ocho millones de lempiras adicionales para la adquisición de estos muebles escolares.



El CNA acusa a los funcionarios de responsabilidad en delitos de violación de deberes de los funcionarios y de administración desleal en contra del patrimonio.



Hasta la hora de publicación de esta nota ni la Secretaría de Educación ni los supuestos involucrados se han pronunciado al respecto.



<h2>Irregularidades en la compra de pupitres</h2>



La directora del CNA, Gabriela Castellanos, explicó en conferencia de prensa que entre las irregularidades se encuentran actas de entrega sin sellos ni firma.



También documentos oficiales con un mismo número de registro, pero con contenido diferente.



La abogada Castellanos dijo que encontraron que la entrega de estos pupitres se realizó por parte del diputado del Partido Libertad y Refundación (Libre), Mauricio Rivera, y no la Secretaría de Educación, utilizando las instituciones estatales para el "<a rel="noreferrer noopener" href="https://www.radiohrn.hn/genera-molestia-que-politicos-aprovechen-emergencias-para-hacer-campanas-director-de-asj-2024-11-17" target="_blank">proselitismo político</a> y compra de conciencias".



Además, al ejecutar el presupuesto, Educación adquirió mobiliario más caro, pese a tener "ofertas más bajas y de la misma calidad".



"Aquí no hay errores, hay intenciones que revelan la falta de respeto por los recursos públicos", indicó la abogada. 



Resaltó que las autoridades "pudiendo ahorrar millones, decidieron despilfarrar".



"Pagaron más de ocho millones de lempiras adicionales sin justificación alguna, que siempre hace falta en el presupuesto de Educación (...)", apuntó. 



Apuntó que los "funcionarios involucrados no solo violan la Ley de Contratación de Estado, se aprovechan de la inocencia y la esperanza" de escolares y maestros "que año con año anhelan ser tomados en cuenta para recibir al menos parte de ese mobiliario".



<blockquote class="twitter-tweet">🚨❗<a href="https://twitter.com/hashtag/LO%C3%9ALTIMO?src=hash&amp;ref_src=twsrc%5Etfw">#LOÚLTIMO</a> | El CNA denuncia derroche injustificado en la compra de pupitres. <a href="https://t.co/b8uLmoIx7s">pic.twitter.com/b8uLmoIx7s</a>— TSiHonduras (@TSiHonduras) <a href="https://twitter.com/TSiHonduras/status/1859646236464382103?ref_src=twsrc%5Etfw">November 21, 2024</a></blockquote>







<h3>Caso de corrupción en Educación</h3>



El miembro de la unidad de investigación del CNA, Luis Urbina, señaló que se hicieron algunas modificaciones en la autorización de la cantidad, distribución y tipo de mobiliario con relación a la solicitud.



Inicialmente se solicitaron 15 millones de lempiras para adquirir mesas y pupitres para los departamentos de Francisco Morazán, Olancho, Yoro y Colón.



Sin embargo, en septiembre de 2022 se modificó dicha petición para incluir la compra de pizarras, pero a su vez se excluyó este último departamento como destinatario.



Luego, Educación realizó una nueva solicitud el 14 de octubre de 2022 por los mismos objetos escolares por un valor de 41 millones de lempiras. 



Según Urbina, esto tenía la intención de cambiar el proceso de licitación pública nacional a una contratación de proceso especial.



Es así que, al final, Educación erogó 38,716,932 lempiras, cuando se pudo haber ahorrado unos ocho millones de lempiras.