Incertidumbre ha causado entre los empresarios y los industriales la posibilidad de que las autoridades vuelvan a establecer restricciones y se ponga en vigencia un retorno al confinamiento.
Una disposición de tal naturaleza le daría el "tiro de gracia" a los pequeños y medianos negocios, además de poner en "serios apuros" a las empresas grandes, el 40 por ciento de las cuales han tenido que cerrar operaciones y otras han debido despedir o suspender a sus colaboradores.
El Gobierno está obligado a planificar las acciones puntuales para hacerle frente a la pandemia covid-19 y evitar la sepultura de los negocios, enfatizaron dirigentes de la empresa privada y del sector industrial.
Dirigentes de dicho sector han subrayado que la pandemia covid no se va a contener mediante el cierre de la economía del país. Para detener la diseminación del nuevo virus se necesita un plan coordinado.
Los pequeños y medianos empresarios han acentuado lo siguiente: "Sería injusto que se determinara un nuevo cierre de los establecimientos comerciales, porque la mayoría de ellos opera a la mitad de su potencialidad; esto es, viven el día a día", reclamaron los comerciantes.
El Cohep ha enviado un mensaje contundente: Bajo la justificación de un violento rebrote de covid es inaceptable el cierre de las empresas.
A juicio de los representantes de la iniciativa privada, las autoridades de la Secretaría de Salud deben hablar con sinceridad y reconocer que han fallado en la vigilancia epidemiológica.
Es necesario reactivar la producción y la prestación de servicios, en lugar de promover su clausura y su fallecimiento, mientras los empresarios tratan de recuperar los puestos de trabajo perdidos por la pandemia, han opinado -de su lado- conocedores de la economía.
La sola posibilidad de que el Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager), limite de nuevo el flujo de la población y se declare el regreso de Honduras al confinamiento causa zozobra.
En amplios segmentos de la actividad económica se ha alertado que una medida de este tipo tendría "efectos catastróficos", a la vez que surgen las preguntas: ¿Por qué no se exploran y definen las líneas de una estrategia para controlar la emergencia epidemiológica?
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Los críticos, entre ellos epidemiólogos y especialistas que ocupan cargos directivos en el Colegio Médico o que están en las primeras posiciones de la ofensiva contra el nuevo virus, coinciden en que el Gobierno no ha hecho lo suficiente para responder a la pandemia del covid-19.
Al final, la factura la está pagando la economía de Honduras, debilitada y sin salidas para su recuperación. Al término de este año, se estima que el Producto Interno Bruto del país habrá caído en por lo menos diez por ciento.
