Con la llegada del Covid-19, a muchos negocios no les quedó de otra que cerrar y otros optaron por reinventarse. El caso de las floristerías no es la excepción, pero están dentro del grupo que a duras penas ha podido sobrevivir. Algunas mejoraron sus estrategias para fortalecer el servicio a domicilio.
Tuvieron que sacar su creatividad a más no poder e incluso aliarse con pequeños artesanos para apoyarse mutuamente. Tras un largo período de bajas ventas, sus propietarios y personal cruzan los dedos en pleno inicio de febrero, mes que por tradición se celebra el día del amor y la amistad o día de los enamorados, por lo que harán lo posible por buscar alivios.
tunota recorrió algunas floristerías, entre ellas: Historias en Papel, donde su propietaria Dalia Lemus, comentó que este sector fue demasiado golpeado el año pasado por efectos de la pandemia en la economía.
Reinventando para sobrevivir
Recalcó que el 2021 avanza a medio vapor. “Aunque seguimos con la pandemia, este año esperamos que el detalle de celebrar el día del amor y la amistad se mantenga, porque en el 2020 las ventas bajaron notablemente y tuvimos que reinventarnos elaborando propuestas nuevas con precios bajos. Además, nos apoyamos con los artesanos locales incorporando detalles a nuestros arreglos", refirió Lemus.
Muchas floristerías, en busca de bajar sus costos, ahora elaboran las bases de sus arreglos y compran las rosas a los productores locales. "Así han logrado ofrecer algo distinto a los clientes, con creatividad y novedad en tiempos muy difíciles", dijo Lemus.
