Un taxista, identificado como David Perry, evitó que ser realizará un atentado en el Hospital de Mujeres Liverpool, Reino Unido al encerrar a un supuesto terrorista que portaba un artefacto explosivo.
De acuerdo al relato de un amigo de Perry, al taxi se subió un hombre solicitando que lo llevaran al Servicio de Conmemoración de la ciudad en la Catedral Anglicana de Liverpool.
Además, agregó que por el tráfico que había en las calles que conducía y las carreteras estaban bloqueadas, decidió cambiar su lugar de destino solicitando que lo llevaran al centro de la ciudad, pero al ver el hospital dijo al taxista que se estacionara allí.
Cabe recalcar que en el centro de la ciudad habían más de mil personas, porque se encontraban conmemorando el día nacional del recuerdo
Asimismo, dijo que Perry cuando iban conduciendo noto que una luz se apagaba y encendía en la ropa del hombre, mientras este la maniobraba.
Además: Hace más de 50 años robó un banco y no lograron encontrarlo, hasta ahora
Medios internacionales dieron a conocer que el sujeto que portaba el artefacto explosivo aún no se ha identificado formalmente.
Vale señalar que cuando explotó el vehículo no hubo víctimas mortales y sólo Perry sufrió cortes, golpes por lo que ingresó al hospital, pero lo dieron de alta.
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