El índice de confianza del consumidor (ICC) permite comprender la confianza de la población con base en sus expectativas personales y de país, según sus ingresos, gastos y empleo en diferentes condiciones de tiempo y factores sociales como edad y ubicación geográfica, entre otros, según el IIES-UNAH.

De este modo la máxima casa de estudios detalló que para calcular el ICC consideró el índice de situación personal actual (ISPA), que es la valoración de la economía actual y de hace seis meses, así como a futuro (ISPF), como perspectiva a seis meses venideros.

Asimismo, se consideró el índice de expectativas económicas (IEE), como percepción de empleo y bienestar general para seis meses a futuro.

El cálculo del ICC de 2022 fue definido al sumar el ISPA (43.13%), el ISPF (68.18%) y el IEE (57.73%), y dividirlo entre tres.

Escalas de confianza

En ese sentido, el IIES clasificó los índices desde pésimo importante (0 a 29%) hasta un optimismo importante (80 a 100%).

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De tal manera, el ICC de 2022 es catalogado como un optimismo bajo, de acuerdo con el estudio realizado por el IIES.

El estudio publicado reveló que la población tiene dicho índice de confianza al considerar que la situación económica seguirá siendo difícil pese a que ve menos complicado encontrar un empleo.

No obstante, los consumidores expresaron que "la estabilidad económica, social y política incidirá en que el país no vaya en la dirección esperada", según el análisis.

ICC por departamento

En otro aspecto, el ICC reflejo un incremento de entre 1.4% y 11.44%, en 16 departamentos y fue en Ocotepeque donde los consumidores tienen mayor confianza en un crecimiento económico.

Por otro lado, en dos departamentos, Intibucá e Islas de la Bahía, el ICC de la población redujo entre 7.46% y 10.7% en 2022.

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Por sexo y edad

Además, los resultados del estudio reflejaron que el ICC tuvo un 53.65% en los hombres y un 57.72% en las mujeres, siendo las últimas las que tienen mayor confianza en un alza económica para los próximos meses.

Asimismo, el análisis arrojó que la generación Z, es decir, los jóvenes nacidos después del año 2000 tienen un 58.01% de ICC, 4.76% más que la generación Y (24 a 43 años), que tienen una confianza económica de 53.25%.

En cambio, el ICC baja en las generaciones X (44 a 58 años) y los "baby boomers" (más de 59 años), que se sitúa en 41.28%.

Ingresos familiares

Por otro lado, el ICC se centró más en los hogares en los que hay ingresos de más de 25,000 lempiras mensuales, donde llegó a 61.13%, mientras que en los hogares donde tienen ingresos inferiores a 6,000 lempiras, el índice de confianza llegó apenas a 52.05%.

Finalmente, el estudio del IIES-UNAH remarcó que es indispensable que Honduras tenga generación de políticas públicas que estimulen e incentiven el gasto privado para promover el crecimiento económico.

Igualmente, el informe publicado reveló que, pese al complejo panorama económico que se vivió en 2022, los consumidores mantienen un optimismo considerable ante la economía nacional y, por consiguiente, la de sus hogares.

En ese sentido, Armando Urtecho, directo ejecutivo del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) expresó que "erradicar la pobreza solo se logra creando prosperidad y solo se genera a través de nuevos y mejores puestos de trabajo".

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