El hecho se suscitó en 2013, cuando Otávio Jordão da Silva de Catanhede, de 20 año de edad, como fue identificado el árbitro, atacó al jugador Josenir dos Santos Abreu (31) y lo dejó gravemente herido.

Ante ello, dos Santos fue trasladado hacia un hospital en un afán por salvarle la vida, pero murió en camino al centro asistencial, según información publicada por El Tiempo obtenida de Globo Esporte.

Es así que, tres personas bajaron de la gradería del recinto deportivo, acorralaron al árbitro y comenzaron golpearlo hasta matarlo a pedradas.

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(Otávio Jordão da Silva Cantanhede, un árbitro de fútbol aficionado brasileño, fue linchado, descuartizado y decapitado por espectadores de fútbol después de apuñalar a un jugador en un partido que dirigió el 30 de junio de 2013).

Posteriormente, lo desmembraron y colgaron su cabeza en un palo de madera, cuyas imágenes fuero captadas por los presentes en sus teléfonos móviles, según El Tiempo.

Tras el hecho, uno de los tres agresores confesó ser uno de los perpetradores del descuartizamiento de árbitro y quedó en manos de las autoridades brasileñas, mientras que los otros dos siguen prófugos de la justicia.

Sin embargo, 10 años después del atroz crimen, las justicia de Brasil no ha brindado más detalles al respecto del crimen del árbitro contra el jugador ni de los tres hinchas en contra del juez del encuentro deportivo.

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