El Ministerio Público (MP) ha dado a conocer este jueves un nuevo requerimiento fiscal contra ocho agentes activos de la DPI, acusados de asociación para delinquir y otros delitos más, en perjuicio de un hombre en San Pedro Sula, quien fue agredido tras un "allanamiento de morada", y fue despojado de sus pertenencias.
A los agentes se les acusa también de robo con violencia e intimidación, abuso de autoridad, allanamiento de morada por funcionarios públicos, falsificación de documentos públicos y tratos crueles, inhumanos o degradantes por funcionario público.
Los agentes identificados son Bayron Isidro Ramos Hernández, Josiel Fernando Rueda Núñez, Wilson Josué Durón Valladares, Carlos Noé Núñez Álvarez, Joel Renán Zambrano Banegas, Rodys Edgardo Hernández Casco, Walter Alexander Muñoz Muñoz y Denis Alfredo Estrada López.
Según la investigación del MP, el incidente ocurrió el 12 de enero de 2024, a las 4:40 de la madrugada, cuando los acusados llegaron a una vivienda en la colonia Monte Fresco de San Pedro Sula, Cortés. Rompieron violentamente el portón e ingresaron, dirigiéndose a la habitación del afectado para golpearlo en todo su cuerpo, mientras otros agentes registraban la casa.
Después de agredir físicamente al hombre, los agentes de la DPI lo interrogaron, preguntándole sobre la ubicación de dinero, drogas, armas de fuego y otros objetos de valor.
#MP presenta requerimiento fiscal contra ocho policías activos de la DPI que implantaron pruebas a ciudadano y le robaron https://t.co/iKE4Ncxbxt pic.twitter.com/XWDdUoxP5C
— Ministerio Público (@MP_Honduras) April 11, 2024
El afectado, cuya identidad se mantiene en reserva, les respondió que no poseía tales cosas, ya que no se dedicaba a actividades delictivas, mientras los agentes le confiscaban teléfonos celulares, una cartera con documentos personales, dinero, un reloj inteligente y un arma de fuego, además de intentar desactivar el sistema de cámaras de seguridad de la vivienda.
Después de más de tres horas de retenerlo ilegalmente y llevarlo a diferentes lugares de San Pedro Sula, los policías le exigieron la suma de 350 mil lempiras para liberarlo. El hombre explicó que no disponía de esa cantidad de dinero. Posteriormente, los agentes lo llevaron a las instalaciones de la DPI en SPS, amenazándolo de muerte.
Al llegar a las instalaciones y presentar informes de investigación falsos, los agentes lo presentaron como miembro de una estructura criminal, plantándole bolsas de cocaína, marihuana y un arma de fuego automática tipo ametralladora marca UZI.
Al remitirlo al MP, se detectó que la evidencia presentada era falsa, por lo que ahora se investiga a los ocho agentes policiales que participaron en perjuicio del hombre.
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