"Honduras jamás ha sido fértil para la inversión. Siempre ha sido raquítica la inversión extranjera y nacional. El día que la producción nacional llegue a los niveles que debería llegar, la inversión extranjera va a venir sin que la llamen", dijo Urbizo en el programa Al Banquillo, de TSi.
Al respecto, el economista catalogó como absurdo gravar la importación de maquinaria e insumos agrícolas, pues afirmó que estos aranceles serían trasladados al costo del producto final, lo que impactaría el precio de la canasta básica y, por ende, la calidad de vida de la ciudadanía.
"Eso no tiene ni pies ni cabeza. Imagínese, cobrar impuestos de introducción e impuesto sobre ventas por un martillo, por ejemplo, y cosas por el estilo. Tenemos problemas estructurales, problemas mentales y problemas conceptuales, andamos a la deriva. Por eso en Latinoamérica es lo que es", condenó.
#AlBanquillo Carlos Urbizo, economista: "Es absurdo que a las actividades agrícolas le cobren impuesto sobre venta de un tractor, de un arado, una pala y otros insumos, lo veo ridículo en un país que pasa con hambrunas como Honduras". pic.twitter.com/CeOAI7qru8
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Exoneraciones
De igual manera, Urbizo se refirió a las exoneraciones de impuestos, mismas que pretende derogar el gobierno de Honduras con el proyecto de Ley de Justicia Tributaria, como una "forma de atraer inteligentemente aquella inversión que solo necesitaba un valor agregado".
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En ese sentido, resaltó que con algunos de los regímenes de exoneración fiscal existentes en Honduras, se ha logrado la creación de empleo, y que aunque "no es una solución a largo plazo para Honduras, pero sí es un alivio increíblemente grande".
"¿Por qué hay incentivos? Primero, es para aliviar obstáculos que pueda haber el mismo Gobierno los ha puesto. Segundo, para equipararse con lo que tiene otros países para poder competir, atraer inversión, para nacionales que puedan invertir", sostuvo.
#AlBanquillo Carlos Urbizo, economista: "Honduras no se inventó las exoneraciones. Existen porque fue una forma de atraer inteligentemente aquella inversión que solo necesitaba un valor agregado". pic.twitter.com/gq1GnjkC0e
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Y prosiguió: "también, en ciertas actividades que no las podrían hacer si no estuvieran esos incentivos, porque eso es un remedio, para mí, es un alivio, contra todos esos abusos que existen".
Fuentes de empleo
Además, el economista hondureño expuso que los empresarios deben ser más hábiles en sus actividades para comprar sus materias primas a bajos costos para vender baratos los productos manufacturados y así, aumentar la producción y el empleo.
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En ese sentido, ejemplificó que si a las personas que tienen ingresos por salario de apenas entre 3,00 y 4,000 lempiras, se las ofrecen trabajo con salarios más altos más beneficios sociales, dejarían sus actividades y tomarían la oferta de trabajo que más le beneficie.
#AlBanquillo Carlos Urbizo, economista: "Los empresarios son como 900 mil que cuentan con dos o tres empleados, no esas grandes empresas. Las grandes empresas son solo el 20% de la fuerza laboral y el 80% de las pequeñas empresas no pueden pagar el salario mínimo". pic.twitter.com/ymoFg5GRqq
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"Las grandes empresas son solo el 20% de la fuerza laboral y el 80% de las pequeñas empresas no pueden pagar el salario mínimo, por eso sale un promedio de 7,200 lempiras por salario y 4,200 para los que trabajan por cuenta propia", dijo Urbizo en Al Banquillo.
"Esa gente está en eso porque no tiene otra cosa que hacer, pero ese que esta ganando 4,000, 3,000 lempiras vendiendo en la calle o en su casa, le ofrece un empleo con salario de 12,000, más seguro social y otros beneficios, sale corriendo, bota lo que esta haciendo y se va para allá", continuó.
De acuerdo con información del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), unos seis millones de hondureños tienen problemas de empleo, sea porque no tienen un puesto de trabajo, o el que tienen no llena completamente sus expectativas.
Además, casi un millón de jóvenes no tiene acceso a trabajo y estudios, y es en la zona rural en la que se concentra más del 54% del total, según el ente de la empresa privada.
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