Entre 142 países evaluados en su índice de Estado de derecho, Honduras figuró en el lugar 116, según el listado que publicó este jueves World Justice Project (WJP). Al analizar la escala de índice de Estado de derecho, que se mide entre 0, con menor calificación, y 1, calificación más cercana al Estado de derecho, Honduras aparece con una puntuación de 0.42. De esta manera, Honduras superó, a nivel de América Latina y el Caribe, a países como México, Bolivia, Nicaragua, Haití y Venezuela, como los países con el nivel más bajo a nivel mundial, con 0.26 de puntuación en el lugar 142. Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida de Hoy Mismo (@hoy_mismo) Mientras tanto, está muy por debajo de países como Uruguay, Costa Rica, Jamica, Argentina, Panamá, Colombia, Guatemala, Colombia y El Salvador. De acuerdo con la evaluación de este año por parte de la ONG, Honduras subió tres lugares con respecto a 2023, cuando apareció en el lugar 119, y 10 lugares con respecto a 2022, cuando figuró en el lugar 126. #SaliditoDelHorno: El más reciente Índice de Estado de Derecho 2024 acaba de salir. - #Honduras por debajo de #ElSalvador y #Guatemala en LatAm. - A nivel global, Hn ocupa el puesto 116 de 142; en el 2023, 119 y en el 2022, en el 126. - Este Índice es considerado por la… pic.twitter.com/kwELEWLPSD— Lester Ramírez Irías (@ElMundoDeLester) October 24, 2024 Calificación mundial Por otro lado, a nivel mundial Dinamarca, Noruega, Finlandia, Suecia, Alemania, Nueva Zelanda, Luxemburgo, Países Bajos (Holanda), Irlanda y Estonia son los 10 países mejor calificados por tener índices de respeto al Estado de derecho aprobados, que van de 0.82 a 0.90. En contraparte, Mauritania, Camerún, Sudán, Egipto, Congo, Nicaragua, Myanmar, Haití, Afganistán, Camboya y Venezuela, son los países con la peor calificación sobre su índice de Estado de derecho, que van de 0.26 a 0.36 de punutación. Deterioro del Estado de derecho El informe más reciente del World Justice Project reveló un preocupante deterioro del Estado de derecho a nivel mundial por séptimo año consecutivo, afectando al 57% de los países encuestados. Este retroceso global subraya,según la entidad, la fragilidad de las instituciones democráticas y el aumento de las tendencias autoritarias, que ponen en riesgo la protección de los derechos humanos. Sin embargo, el WJP destaca que la desaceleración de este deterioro es una señal alentadora para las naciones comprometidas con la recuperación. A pesar de las adversidades, el índice también revela avances significativos en la lucha contra la corrupción, con el 59% de los países encuestados mostrando mejoras en este aspecto. Este progreso es especialmente relevante en un momento donde la justicia civil aún enfrenta desafíos derivados de la pandemia por covid-19, pero la justicia penal ha registrado una mayor eficacia a nivel global. De tal manera, la tendencia positiva en la ausencia de corrupción es un reflejo de los esfuerzos colectivos de las naciones por fortalecer la transparencia en sus sistemas gubernamentales.