La Policía Nacional de Honduras informó el miércoles (03.03.2022) que ya asignó equipos para investigar y esclarecer el asesinato del sacerdote José Enrique Vásquez, un caso que calificaron como "atípico y difícil".

"Es un hecho muy lamentable. Nosotros ya desplazamos el equipo de investigación de la DPI de San Pedro Sula y también un equipo de inteligencia policial", dijo en La Chicharra de HRN el director de la Policía Nacional, Gustavo Sánchez.

La investigación estará al mando del jefe departamental de Yoro, el comisario Miguel Ángel Villatoro, dijo el comisionado.

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"Es un hecho no común, es muy difícil y queda investigar lo que hay en torno a este incidente", agregó.

Esclarecer crimen del padre Quique

El jefe policial manifestó que las primeras horas de la muerte violenta de una persona son vitales para hacer una investigación, pero la identificación del padre "Quique" se hizo un día después. No obstante, se comprometió a esclarecer el crimen.

"No podemos especular en estos momentos sobre lo que sucedió, sabemos dónde se encontró el cuerpo del sacerdote, dónde se encontró su vehículo y dónde fue la última vez que lo vieron. Se están realizando las pesquisas correspondientes y esperamos tener más información en las próximas horas", dijo Sánchez.

De momento la Policía Nacional no tiene información ni registros de denuncias del padre Vásquez.

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"Es un hecho complicado porque en el imaginario mental de la población un sacerdote o un pastor es una persona de Dios, de mucha confianza y de mucho respeto. Este es un hecho totalmente atípico y tenemos el compromiso moral y profesional de investigar y llegar a las últimas consecuencias", concluyó el oficial.

Asesinato del padre Enrique Vásquez

El sacerdote Enrique Vásquez fue asesinado el martes cerca del puente La Regina del municipio de Morazán, Yoro, después de que se reportó como desaparecido en San Pedro Sula, en el norte de Honduras.

Fue hasta el miércoles (03.03.2022) cuando familiares y el obispo de la diócesis de San Pedro Sula, Ángel Garachana, identificaron su cadáver en la morgue judicial de esa ciudad hondureña.

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El cadáver del religioso fue ingresado a la morgue a las 10:00 de la noche del martes. El mismo presentaba seis disparos de arma de fuego, según la información que se brindó a monseñor Garachana y familiares de la víctima.

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